El mountro de la lavadora.

Bajo la mirada, ya estaba vencida, solo habitaba una respuesta en su mente, si hacia lo contrario a aquella respuesta, le perjudicaria la existencia mas adelante, quien sabe. Ella le dijo a su madre, donde estaba el detergente, su madre no le quizo decir, con el fin de que ella lo lavase a mano, pues esto empeoro, y se undio mas en el campo de batalla ya ganado por su madre, la arena sobre ella y la suciedad sobre su ropa.

Sin mirar atras cogio toda su ropa blanca y empezo a refregar, pues se sentia devastecida, necesitaba algo mas eficaz, saliendo de la lavanderia, se sento en la cocina, cogio el control remoto, para encender la television, mientras su ropa se quedaba remojando. Al prender la television, no habia encontrado nada interezante en ella, pero siguio haciendo zapping y en eso pasa velozmente por un canal que capturo su mirada, provocando que regrese a aquel canal, pues se trataba de un comercial, de un detergente nuevo llegado al mercado, sus ojos se iluminaron y las lagrimas brotaron, ella penso que era el indicado, que ese detergente seria la solucion a todos sus problemas, pues en el momento en que oye el mensaje por el hombre con la inmensa sonrisa blanca 'No maltrata sus manos' su sonrisa reesplandecio y miro sus manos, diciendo que aun no era tan tarde, era el inicio de algo nuevo, de algo en contra de las ideas conservadoras de su madre, pero que le traeria la libertad rapidamente.

Se paro de la silla, cogio sus llaves y se dirigio hacia la puerta, muy feliz y segura de si misma y del paso que estaria a punto de cometer. Con algunas monedas en su bolsillo, entra a la tienda, mirando fijamente al vendedor, y este con una sonrisa muy simpatica le dice: Que se lo ofrece, jovencita? -Deme un Centrifugaz, el que hace que las manchas se vaya como una estrella fugaz!-dijo muy convencida. -Jajaja!-entre risas responde el vendedor-Dicen que es muy bueno no muchacha? esta solo s/ 4.90. -Pues no se diga mas, amable sujeto, cobrese!

Al tenerlo en sus manos, dejando el cambio que eran 10 centimos por haber pagado con una moneda de s/5.00, no le importo y salio corriendo de la tienda, mientras el vendedor gritaba SU VUEEEELTOOOOO! Ella ignoro los gritos y siguio adelante, temia que su madre descubriera lo que estaba haciendo. Llega a su casa tratando de no hace ruido, entra a la lavanderia, para enchufar la lavadora, y pone su ropa en Fuzzy, vierte el detergente sobre su ropa, dejando que actue solo. Al mirar que todo marchaba a la perfeccion, se va a jugar Yoshi's Island.

-Valentinaa, hija ya me voy, ire donde tu abuela, no olvides lavar tu ropa eh! nada de trampitas! -dice su mama antes de salir.

-Ya, ya, mama. -Valentina, con tal distraccion responde.

Su madre se retira.

Valentina se encontraba totalmente enviciada con el juego, y no dejaba de repetir 'Ya paso el castillo, y enjuago' y esa frase la repitio varias veces. Ya eran las 7 y 30 de la tarde, y habian pasado varias horas desde que dejo la ropa remojandose, ya que habia olvidado por completo activar la centrifuga. Mientras seguia pegada en el jueguito, siente que alguien le toca el hombro.

-Ya mama, dejame horita voy-dice.

-No soy tu mama-dice una voz aguda, bastante peculiar.

Valentina se sobresalta bastante y pone pause en el juego, suelta su gameboy, y volta con temor para ver quien era. Al voltear se da con tremenda sorpresa, era un mounstro de algodon, de un metro de estatura, con una cabeza redonda, y blanco por completo.

-AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHH!!!!!-es lo unico que pudo gritar en ese momento.

-No me temas, lindura, solo soy el producto de tu distraccion!- el mountro le dice pacificamente.

-AHH! ALEJATE DE MI MOUNSTRO PELUDO DE TELA, O NOSE DE QUE, VETEEEE, ESPERA ESPERA, QUE DIJSITE QUE ERAS?-desesperada le pregunto.

-Soy Centrifugaz, el mountro de la lavadora, naci por tu culpa, toda tu ropa que se quedo remojando soy yo, combinado con ese nuevo detergente que compraste.-le respondio, el mounstro.

-DIOS MIO SANTO COMO ME DESHAGO DE TI, ERES HORRIBLE! LARGATE ANTES DE QUE MI MAMA VENGA, QUIERO MI ROPA DE VUELTA! AAAAAAAAAAAHHHHH!-Enfadada le dijo.

-Pues lamento no satisfacer tu solicitud, pero me quedare aqui, tu me creaste, y tienes que acostumbrarte a mi precencia.

-Te matare, criatura extrana!!!- grito Valentina.

-Mejor aborta a algun hijo que decidas tener, ya que yo soy como tu hijo tambien, tu me creaste, ASESINA!-El mounstro Centrifugaz le dijo con la voz levantada.

-Ok ok, espera quieres decir que ahora me consideras tu madre? y que si soy tu madre, haras todo lo que tu madre te pida que hagas, verdad?

-Pues ya veo que tu no me quieres, solo quieres que utilizarme para tu beneficio!

-Ehhh NO, mira, comprendeme estoy algo asustada, nunca me imagine que mi ropa cobraria vida y se formaria un ser tan bizarro como el que estoy viendo ahora, me haz escandalizado bastante, pero si quieres podemos entablar una amistad.

-Ohhh, bueno comencemos de nuevo, si a eso te refieres.

-Si, lo siento, por decirte esas cosas, estaba asustada, ahora lo que me asusta mas es como decirle a mi madre lo sucedido.

-Oh, sera mejor que no le digas na da, yo me mantendre ocultado en tu habitacion cuando vayas a la escuela, esta bien?

- Si, me parece buena idea, pero cuidado que te vea, se puede impresionar bastante, tu sabes que esta vieja y eso le puede chocar.

- Si, ok. -asintio el mounstro.

Y este fue el inicio a Centrifugaz, el mountro de la lavadora, un miembro mas de C. Pogonoits, ante ustedes muy buenas tardes. Y ya saben chicos, no dejen remojando su ropa, por lo menos si es que no quieren llevarse una impresion.

Por mi parte, ire a enjuagar mi ropa interior, je!